El jamón ibérico es todo un manjar, pero dependiendo de la zona donde cortemos el jamón, el sabor y color cambia.
Esto es debido a que el jamón ibérico tiene partes diferenciadas que hay que conocer. Aunque de todas ellas podemos aprovechar su carne y sabor.
- Jarrete
- Maza
- Contra
- Punta
- Babilla
Partes de un jamón ibérico
Como adelantamos, el jamón ibérico está compuesto de varias zonas y cada una de ellas tiene características diferentes.
Si ponemos la pata hacia arriba, podemos ver la pezuña y la caña, que son dos partes de las que no se puede sacar jamón.
Ahora bien, vamos a ver las partes de las que sí podemos sacar lonchas de jamón ibérico:
- Jarrete
El jarrete está al lado de la caña, mencionada anteriormente. Muchas personas desconocen esta parte y la desaprovechan.
Se encuentra junto a la tibia y el peroné, su textura es la más dura y fibrosa por su concentración de tendones y nervios.
Aun así, suele ser la parte más aceitosa del jamón y por tanto, contiene un sabor intenso.
Por la dureza mencionada, suele ser ideal utilizar esta parte del jamón para elaborar taquitos.
- Maza
La maza va desde el jarrete al hueso de la cadera y es la parte más ancha del jamón. Donde se encuentra la carne.
Es considerada la mejor parte por esta cantidad de producto y por la zona donde mayor grasa infiltrada hay. Por lo que, cuenta con un sabor único y jugoso.
La loncha de esta zona está veteada por la grasa y tiene un color rojo intenso. Al ser la parte más ancha, es de donde se sacan lonchas más grandes y homogéneas.
- Contra:
Si continuamos por la pata del jamón ibérico, resaltamos otra zona llamada la contra o la contramaza. Es la siguiente parte después de la maza tras el hueso de la cadera.
Es una parte del jamón ibérico estrecha, curada y con mayor proporción de grasa. Propiedad que le da un gran sabor.
- Punta:
La punta contiene mucha grasa y se encuentra en la parte opuesta a la pezuña.
Es una de las partes más sabrosas y saladas del jamón ibérico.
- Babilla:
La babilla se encuentra al lado opuesto de la maza, es decir, justo debajo.
Sus lonchas son rojas y menos jugosas que la maza, por ser la zona con menor carne y grasa. Se considera la menos jugosa y es más difícil de cortar en lonchas.
Dependiendo del consumo que se haga, si se va a realizar de manera lenta, es muy recomendable empezar el jamón por este lado para conservar la jugosidad de la maza.
Si por el contrario, se va a consumir en pocas semanas, lo ideal es comenzar por la maza.
Como se puede apreciar, las zonas del jamón ibérico son muy variadas y fáciles de identificar. Dependiendo del consumo que se haga o lo que se busque, se puede cortar el jamón de una u otra parte.
Tal y como dice el refrán, del cerdo se comen hasta los andares, ya que, todas las zonas que componen la pata de jamón ibérico son aprovechables.
Si se quiere, una vez acabado el jamón, su hueso puede servir para realizar algún caldo o sopa con un gran sabor.
Ahora que conocemos cómo son las partes del jamón ibérico, no lo dudes y compra un jamón ibérico.
En Ibéricos Berman contamos con jamones ibéricos para lonchear en tu domicilio o paquetes de jamón listos para consumir.
Somos una empresa especializada en ibéricos con el objetivo de ofrecer el mejor producto y calidad a nuestros clientes.
Prueba nuestros productos. En menos de 24 horas lo tendrás en tu domicilio.